Es una serie de detalles, con los que poco a poco nos vamos identificando con una empresa u organización. Son esos pequeños momentos que fueron diseñados para capturar nuestra atención y conseguir un "wow" de parte de un cliente promedio.
Identificar estos momentos, documentarlos y mejorarlos resulta indispensable para conseguir destacarse en un mundo cada vez más fácil de copiar.
Finalmente será el personal de la compañía quien marque la diferencia entre una experiencia "normal" y una experiencia "única".
Se identifica el negocio y los mejores procesos para el mismo.
Identificación del modelo actual y sus diversas etapas.
Se define cómo debería ser la experiencia ideal de un cliente promedio.
Se alinean el servicio ideal y el actual.
Se identifican aquellos puntos de contacto en los que podría haber errores y/o demoras excesivas para tener un plan de acción preventivo.
En esta etapa se alinean el nuevo modelo y el equipo encargado de prestar el servicio, de manera que interioricen los nuevos procesos y cumplan el objetivo del negocio.
No solo es responsabilidad del personal brindar un servicio de primer nivel, aquí se evalúan qué otros elementos afectan el servicio y pueden ser mejorados para aumentar la experiencia del cliente.
Junto al equipo de trabajo, se definen mejoras al servicio para garantizar que se cuenta con la mejor experiencia para los clientes.
Si se requieren nuevos recursos también le apoyamos en:
Todos los negocios son diferentes y cada uno requiere un equipo de Marketing experto que lo apoye.